Dono per tancat el tema de l'autoestima amb una última aportació.
Un llibre del qual n'he sentit molt a parlar i em sento encuriosida per llegir-lo, és del autor Luis Rojas, La autoestima. Nuestra fuerza secreta. He pogut trobar diverses crítiques de les quals penjaré alguna a continuació.
A veure si consegueixo despertar el vostre interés per llegir-lo, ja que trobu que és molt interesant l'enfocament que li dóna aquest tema, ja que d'entrada afirma que no preten donar cap teoria per millorar l'autoestima, sinó que únicament intenta reflexar com ens construim a nosaltres mateixos, com ens valorem i com això ens afecta a la nostra vida.
Breu resum del llibre:
Aprendre a sentir i pensa en positiu és una inversió summament rentable per vèncer en la batalla contra el pessimisme i desenvolupar al màxim les possibilitats de viure sans i feliços. En aquest llibre, el psiquiatre Luis Rojas Marcos repassa la història del pensament positiu; detalla els ingredients que distingeixen la disposició optimista de la pessimista; explora les forces que forgen el nostre temperament, identifica els verins més perjudicials per l’optimisme, descriu estratègies per provar l’eficàcia per fomentar una disposició positiva i examinar la influència del optimisme en les relacions amb altres persones, en la salut i en el treball. I finalment amb un anàlisi de la qualitat més valuosa del nostre optimisme: la seva enorme i provada utilitat a l’hora de fer front a l’adversitat en la vida.
Crítiques:
Después del éxito de su libro La fuerza del optimismo, el psiquiatra español Luis Rojas Marcos ha seguido este año en la misma línea con su última obra, La autoestima. No se trata de un libro de autoayuda, como dejó bien claro el día de su presentación, sino de un análisis de los factores que crean la imagen que tenemos de nosotros mismos.
Ahí están, explica el autor, los genes y los afectos que contamos desde la infancia, que van influyendo en las millones de interacciones neuronales que se producen en el cerebro hasta hacernos idea de quién somos. Rojas Marcos, profesor de Psiquiatría en la Universidad de Nueva York, explica que para valorarnos hay que ser conscientes de lo que somos, del paquete genético y afectivo que tenemos, y luego tener capacidad de introspección para explicar nuestros sentimientos.
En esta definición de lo que somos, el autor reconoce que tienen un gran papel las costumbres, creencias y prioridades de la cultura en la que crecemos: a mayor desequilibrio entre las aspiraciones que se crean y las oportunidades reales, más difícil será tener una buena autoestima. Así, en EEUU las personas se definen por sus posesiones, mientras que los chinos lo hacen por sus virtudes comunitarias y sus relaciones. Y como no toda autoestima es buena, Rojas Marcos no obvia los problemas que genera el narcisismo y la prepotencia, que puede acabar en violencia y abuso de poder.
ROSA M. TRISTÁN
Crítica extreta del blog: http://robin-libros.blogspot.com/2007/05/la-autoestima-de-luis-rojas-marcos.html
Cada día me gusta más Rojas Marcos. Y eso que cuando vi su foto por primera vez, no puede menos que pensar que era un tipo de aspecto delgado, de "ratón de biblioteca",tan listo... que no se yo, no sé. Seguro que se creía superior a todos los demás. Si, ya se que una vez mas aparecen mis prejuicios, y que una vez mas la experiencia me demuestra lo equivocada que estaba.
Su modo de escribir es claro y directo, y he de decir que sus libros no los leo, los devoro. Sus libros son amenos, clarifican muchas ideas y nos ayudan a entendernos mejor. Lo que conduce a vivir mejor.
En esta ocasión nos habla de la autoestima. Como se construye, que factores tienen mas importancia. Los condicionantes sociales, culturales... Lo saludable de tener una autoestima adecuada o ligeramente por encima. Que el tener una autoestima ligeramente inferior, nos hace ver las montañas y obstáculos de la vida mas difíciles de superar. De los efectos negativos que puede tener tanto una autoestima demasiado elevada o al revés, demasiado baja.
Vamos, considero muy recomendable el leerlo.
Lo que mas me ha sorprendido al leerlo es el dato que presenta de que la mayoría de las personas tenemos una autoestima bastante buena. Y autoanalizandome, creo que mi autoestima es globalmente sana.
Otro punto que me ha sorprendido, es el que en EEUU se considere bueno el tener una autoestima buena, mientras que en Europa, sucede lo contrario.
Pienso que si a uno le va bien en la vida y está contento consigo mismo, no le gusta publicarlo ni pregonarlo por miedo a que su "buena suerte" se tuerza. Vamos, para no provocar a la Diosa Fortuna.
Sin embargo, el estilo de vida estadounidense (sueño americano), nos dice que nuestro buen hacer, depende básicamente de nosotros, y que si crees en ti, lograras lo que te propones. Con lo que uno puede pregonar lo bien y contento que está consigo mismo. Son méritos suyos y nada ni nadie se los puede quitar.
Yo, me uno mas a la forma de pensar europea. Sin duda alguna, se vive mucho mejor con una buena autoestima, pero no debemos nunca olvidar que una persona es siempre el resultado de ella misma y sus circunstancias. Por tanto, nuestra autoestima puede ser modificada al alza, pero no nos engañemos, también a la baja, según "los avatares de la diosa fortuna" o "el destino" o como le queramos llamar. Vamos, que lo mejor si te va bien es pasar desapercibido.
Entrevista a Luis Rojas
Per finalitzar adjunto una curta entrevista feta a l'autor del llibre on fa alguns comentaris sobre aquest:
El psiquiatra español por excelencia, especialista en los aspectos positivos de la mente, se adentra en su nuevo libro, La autoestima: nuestra fuerza secreta (Espasa), en la valoración del yo. Del cero al diez, él se pone un 7,5. ¿Qué puntuación te darías tú?
¿Realmente cree que podemos contabilizar nuestro nivel de autoestima?
Es algo subjetivo, no hay una máquina que la mida, como la de la presión arterial o el colesterol, y además es íntima y secreta. Podemos bromear con el tema, pero no vamos por ahí diciendo «mi nivel de autoestima es...» Es algo que llevamos dentro y que tiene un impacto real en nuestro destino.
¿De qué manera afecta a nuestra vida?
La autoestima se basa en la valoración del yo, el concepto que tenemos de nosotros mismos, la imagen que nos creamos de cómo somos. Eso va repercutir en nuestro día a día, en las relaciones que entablamos con el entorno, con los demás... Una persona que piensa que no puede alcanzar algo dice «no» a las oportunidades que se le presentan, porque no se cree capaz.
¿Es este un libro de autoayuda?
Yo no ofrezco recetas para que crezca la autoestima. Eso es muy simplista. Al final, a lo que aspiro es que sea un viaje sobre cómo construimos el concepto de nosotros mismos, cómo nos valoramos y cómo se refleja en nuestra vida. Leyendo el libro no va a crecer tu autoestima pero a lo mejor aprendes a relativizar aspectos a los que das de masiada importancia o a hacerte preguntas sobre tu vida que no te habías parado a pensar. Por ejemplo, ¿qué valoración haces de ti mismo, cómo eres, cómo actúas o te relacionas con los demás?
¿Qué factores influyen en la valoración que hacemos de nosotros mismos?
Depende de lo que sea importante para cada uno: la capacidad para relacionarse con los demás, la eficacia en el trabajo, el éxito, el dinero, las propiedades que ha conseguido, el aspecto físico...
¿Hay diferencias de género?
En general, las mujeres dais más importancia a las relaciones personales y al aspecto físico, la tiranía de la belleza; y los hombres, al éxito en el trabajo. Aunque las valoraciones se están acercando porque hay una tendencia a hacer y pensar lo mismo.
En su libro anterior afirmaba que la felicidad tiene un componente genético. ¿Ocurre lo mismo con la autoestima?
Sí, esto se ha demostrado en estudios con mellizos que han llevado vidas diferentes, que es la situación ideal para estudiar el poder de los genes. Pero nos afecta en una tercera parte, como mucho. El resto, lo determinan nuestra experiencia personal, el esfuerzo que invertimos en hacer cosas, la sociedad... A partir de los dos años, los niños empiezan a construir la autoestima en función de la valoración que los padres y el entorno hacen de ellos.
¿Existen ciertas pautas que fomenten su desarrollo saludable?
La seguridad, el afecto, las respuestas sensatas. Por ejemplo, el niño está pintando y dice: «Mamá, esto no me ha salido bien.» Y la madre contesta: «Es que hoy estás cansado, inténtalo mañana.» O bien: «Es que dibujar no es lo tuyo.» Se trata de evaluarlos por lo que hacen, no a ellos como personas.
¿Cómo condiciona la sociedad en el nivel de autoestima de sus ciudadanos?
Una sociedad que fomenta aspiraciones inalcanzables crea ciudadanos con un bajo nivel de autoestima. En Occidente, la competitividad y el desequilibrio entre las expectativas que se crean y las oportunidades que se ofrecen son un problema.
¿Existen diferencias entre Estados Unidos, donde vive, y España?
Son mucho mayores con la civilizaciones orientales. Entre España y EEUU se notan más entre los jóvenes. Resulta sorprendente la alta autoestima que tienen los españoles, al tiempo que se quejan de falta de trabajo, dinero, expectativas...
¿Cómo se explica esa contradicción?
Simplemente, descartan los factores negativos para evaluarse, consciente o inconscientemente. Tienen en cuenta el éxito en el deporte, cómo se relacionan o lo que ligan. Es puro instinto de supervivencia. Si pides a cualquiera –salvo en casos de depresión– que valore de cero a diez su nivel de autoestima, verás que da siempre de siete para arriba. El ser humano tiene una gran capacidad para sobrevivir, y esto nos lleva a amañar la realidad para sentirnos mejor. Sin una dosis razonable de autoengaño no se podría vivir. Necesitamos encontrar justificaciones para mantener un nivel de autoestima, porque no quererte a ti mismo es muy duro.